"Ten en cuenta también que tu pareja probablemente cambiará con el tiempo, por lo que un sentido compartido de curiosidad, estar abierto a las formas en que él o ella cambia, puede permitirte identificar las formas en que ha cambiado para bien", apunta Zinn.

El respeto mutuo es essential en cualquier relación. En el matrimonio, esto significa reconocer la dignidad, los derechos y las opiniones del otro. También significa ser tolerante con las diferencias y limitaciones de tu pareja.

No me había dado cuenta del estado de mi cuerpo hasta que perdí peso. En mi mente todavía estoy en mis 20 tantos años. Me siento mejor, luzco mejor y a pesar de que nuestro matrimonio no parecía estar en peligro alguno, mi esposo y yo vemos y sentimos la diferencia.

El famoso filósofo Dietrich Von Hildebrand llamaba al respeto `la madre de todas las virtudes´, e insistía en que el respeto es la clave para una vida feliz y desde luego para un matrimonio feliz.”

Protégenos de las cosas que nos dividen, ya sea el tiempo de nuestras ocupaciones diarias, alguna actividad recreativa o una amistad que no es sana para nuestro matrimonio.

Un buen hábito para fomentar el respeto mutuo es tratar a tu pareja de la misma manera que te gustaría ser tratado. Esto significa evitar insultos, descalificaciones o comportamientos agresivos, y buscar soluciones pacíficas a los conflictos.

Comunicación constante: No esperes a que surja un problema para hablar con tu pareja. Mantén una comunicación constante y fluida para que ambos se sientan cómodos y puedan expresar sus preocupaciones y emociones.

Escuchar con un corazón honesto y humilde, es lo que en verdad nos ayuda a vernos como en realidad somos.

Necesitamos ser liberados de lo que nos impide ser hospitalarios y, para ello, debemos mirar la hospitalidad de nuestro Señor, quien nos recibe libremente como sus hijos.

Una de estas sencillas cosas es tener conocimiento de lo que generalmente check these guys out le enoja a tu pareja. Y no porque seas adivino o tengas una lista en la cartera sobre todos los puntos que tu pareja detesta, pero pueden saber lo que les funciona y tener la intención de eliminar los malos hábitos que tienden a hundir su relación.

Ante todo, el que la mujer tenga que obedecer, no significa que la mujer valga menos que el hombre, que no tenga la misma dignidad y categoría que él. Tampoco significa que la mujer haya de obedecer todos los caprichos y deseos del hombre, aun aquellos que no se pueden cumplir sin humillar la dignidad de la mujer o sin cometer pecado.

Cuando pienso en la «mesa acquainted común», me estoy refiriendo, no tan sólo al lugar en que se reúne en intimidad toda la familia, sino a la forma de organizarse la vida en común entre los esposos, a aquella comunión espiritual y armonía que debe reinar entre ellos, lo que constituye el fundamento del matrimonio feliz y que se apoya sobre dos columnas: la autoridad y el amor.

¿Cansado de tus comportamientos dañinos? Estas preguntas te ayudarán a realizar el cambio que necesitas

Al trabajar juntos para fortalecer estos aspectos, las parejas pueden construir una relación sólida y satisfactoria que dure toda la vida.